Según un documento de CEPAL las pérdidas en el sector turístico en Perú se estimaron en US$ 3.939 millones durante 2020, habiéndose perdido alrededor de 220 mil empleos solo por efectos de la caída en el sector turismo. Y uno de los lugares de mayor atractivo turístico al margen de Machu Picchu es la Reserva Nacional de Paracas, ubicada en Pisco, departamento de Ica.
Con el fin de conocer la situación del turismo en esa zona entrevistamos al presidente de la Cámara de Turismo y Comercio Exterior de Paracas, Eduardo Jauregui, quien se remonto al año 2007 y recordó cuando Paracas y la ciudad de Pisco fue azotada un 15 de agosto por un trágico terremoto que paralizó el turismo.
“De esa fecha de agosto del 2007 a marzo del 2020, el turismo fue creciendo de manera galopante, habiéndose llegado a recibir casi 900,000 turistas y con la mira de llegar a la cifra establecida de 1 millón de turistas, sin embargo, la pandemia cambio todo el escenario para Paracas y hemos retrocedido. Solo los dos primeros meses del 2020 fueron buenos habiendo recibido por mes 100,000 turistas y veraneantes”, detallo.
Añadió que en esta zona donde se ubica la Reserva Natural de Paracas, se encuentran instalados media docena de hoteles de 5 y 4 estrellas, que, a juicio de Jauregui, es algo que no hay en toda la región Ica, y permite contar con camas para un turismo muy exigente. Aparte hay hoteles de 3, 2 y 1 estrella para todo tipo de público.
“Del casi millón de turistas que hubo el año pasado hemos llegado al 25%, y pensamos que este 2021 va a ser igual o peor que el año pasado. Hay hoteles que se están alquilando, otros vendiendo y más de una docena de hoteles pequeños, pequeños backpackers que están en alquiler o en venta y muchos restaurantes pequeños están cerrados”.
Vacunas
“Teníamos una gran esperanza en las vacunas, pero como vemos va más despacio que una tortuga, y peor aún, cuando el 11 de abril se elija a los candidatos que participen en la segunda vuelta, el actual presidente ya no va a querer comprometerse hasta el 28 de julio en ningún tipo de compra de vacunas porque habrá un nuevo Congreso y Poder Ejecutivo que lo va a fiscalizar y prácticamente de abril a julio se va a paralizar cualquier compra de vacunas”, resaltó.
El presidente de Capatur señaló “estamos metidos en un callejón sin salida en la gestión pública, producto de la grave crisis política, sanitaria, económica donde se requiere tener un buen mando de gestión pública a fin de solucionar los problemas que aqueja al país”.
Protocolos
“A pesar de la situación reinante, desde el primero de junio del año pasado hemos venido operando con los protocolos correspondientes, donde cada 8 días se les toma pruebas de Covid a los trabajadores. Venimos llevando un control estricto con una brigada médica de manera privada que nos supervisa de tal manera que hasta ahora no hemos tenido contagios en los trabajadores”.
Acotó que desde el año pasado, y a fin de ser rígidos con los protocolos los trabajadores no se van a su casa, sino a un inmueble acondicionado donde descansan, el trabajador opera 4 a 5 semanas y luego se va 5 días a su casa, y cuando regresa se le hace la prueba Covid, y eso son costos adicionales que los asumimos porque la salud no tiene precio, hay que bajar los costos de hospedaje, y todos esos costos adicionales hay que asumirlos”.
Frente a toda esta situación el Estado esta ausente, si en épocas sin pandemia el Estado ha estado ausente en el turismo, ahora con pandemia está más ausente todavía, resalto el presidente de la Cámara de Turismo y Comercio Exterior de Paracas.
Mala estructura
“El problema en el Perú es que el turismo está mal estructurado no hay comando único. ¿A qué me refiero? Que como ministerio debe tener una normatividad, pero en las regiones existe un gobierno regional, y el gobierno regional nombra al director de turismo. Existen las municipalidades provinciales y distritales, y tienen ahí una subgerencia de turismo; pero el poder ejecutivo es uno, el gobierno regional es otro y el municipio es otro grupo político; y a estos grupos políticos generalmente, tanto regional como municipal, nombran en el área de turismo a un allegado a ellos, que de repente es veterinario, abogado o no ponen a nadie, porque no conocen absolutamente nada de turismo y el Estado pierde presencia”.
“Pongámoslo así “¿Por qué un país como el Perú, con tantas potencialidades como su geografía, historia, naturaleza, con un Machu Picchu que es una maravilla del mundo es menor que Chile que nos gana en turismo?, eso pasa porque en el Perú hay una mala gestión del turismo, desde el punto de vista público.
El presidente de Capatur agrega que lo que pasa en Paracas dentro de la Región Ica, sucede en otras regiones del Perú, es decir, es el mismo problema. Sin embargo, es una suerte que se nombre en un gobierno regional de cualquier región, a una persona entendida.
Promoción turística
“En cuanto a la promoción turística, esa es una función del Estado, pero la verdad es como pedirle “peras al olmo”. Es por eso que los privados juntamos una platita de nuestro bolsillo e intentamos al menos promocionar Paracas. Hasta ahí llega la mano del sector privado, de nuestro propio bolsillo”.
“El auge del turismo en Paracas lo hemos impulsado los privados, el Estado ha venido y se ha montado ahí, y encima cobra por entrar a la reserva de Paracas 11 soles por persona y no ofrecen ningún servicio. Subir a las islas Ballestas también cobran 11 soles. O sea, el Estado más bien se está aprovechando de la promoción turística y están cobrando 11 soles, sobrecargando al turista”.
“Realmente el Estado interviene pesimamente en una zona tan bella como Paracas. Hemos comparado nuestros atractivos turísticos con los de Punta Cana, Cancún, La Habana, Varadero y puedo decir que tenemos mejor destino turístico. La diferencia es que Paracas tiene una reserva marina, tenemos la razón de salir de la orilla de playa y visitar toda una fauna de lobos y aves que no lo ofrecen Cancún, Punta Cana y La Habana. Todos tenemos playas, sol; pero Paracas ofrece lobos marinos y aves que no lo ofrecen ellos”.
Detalla que PROMPERU tiene 180 millones de soles para promocionar, pero esta promoción no es como debe de ser. Sin embargo, precisó que dicha institución es una buena herramienta para la promoción turística, pero el problema es que los gobiernos regionales y locales que deben complementar esa labor, no son recíprocos a la labor de POMPERU.
Aeropuerto Paracas: elefante blanco
“Paracas crece porque, en primer lugar, nos encontramos a 2 horas y media del gran destino Lima; segundo, crece porque tenemos una doble vía maravillosa, ya que se llega en dos horas saliendo de Atocongo a Paracas, es decir hay una buena conectividad. Pero como contraparte, tenemos un moderno aeropuerto en Paracas, hermoso, sin embargo, es un elefante blanco”.
“Es un elefante blanco porque “Aeropuertos del Perú”, que es el concesionario de ese aeropuerto, tiene intereses en el Aeropuerto Jorge Chávez a través de Talma; a ese aeropuerto lo tiene aguantado para que toda la mercadería venga al aeropuerto de Lima y de repente cobrará tarifas altas allá, generando la postergación de una región, por los intereses de una empresa”, enfatizó.
“Si el aeropuerto en Paracas funcionará es para unir Paracas como destino turístico de un millón de turistas, con Cuzco que es puerta de entrada de Bolivia. O sea, La Paz–Cuzco–Paracas y apuntalamos al mercado boliviano. Entonces se está perdiendo esa oportunidad de crecimiento. Si nosotros hacemos que funcione ese aeropuerto, tranquilamente traemos a millones de turistas a Paracas”, menciono Eduardo Jauregui.
El presidente de Capatur destacó que el turismo en Paracas se va a reavivar en la medida que los viajeros tengan la seguridad sanitaria y algunos estén vacunados; así como en la medida baje el contagio del COVID. Aseveró que lamentablemente por las demoras en la vacuna contra el Covid, es muy poco lo que se puede hacer, por eso considera que el 2021, está perdido, sin embargo, cree que el 2022 será otro panorama.
Así también destalló que tiene que haber una estrategia de las nuevas autoridades de apuntalar la minería, agro exportación y turismo. “Creo que son los tres ejes que van a generar divisas, desarrollo y crecimiento económico; y diseñar una política que permita el crecimiento turístico y doblar al 2030, 10 millones de turistas para el Perú. Trabajar con una estrategia y rediseñar el gobierno en su gestión pública, el turismo” señaló.